El apego y expectativas son limitaciones del amor. Cuando el apego surge en el lugar del amor, se ve al otro como alguien separado, a sus aferramientos y necesidades.
El apego es condicional, busca el control y teme la pérdida. Pregúntale a tu corazón si el apego ha reemplazado el amor. Si le hablamos a nuestro corazón, siempre nos dirá la verdad.
Cuando nos preocupamos por los otros con expectativas, realmente queremos que sean de otra manera. El apego a nuestras esperanzas y deseos, a nuestras expectativas sutiles, destruye el espacio tierno del amor. Incluso las expectativas más benevolentes pueden sentirse como presiones y juicios hacia el otro.
El amor es generoso y no implica obligaciones. Se satisface a sí mismo. Es valiente. El amor ofrece generosidad sin imponer exigencias de devolución.
Jack Kornfield
Gracias 😉