Soltando el APEGO

Esta semana en el grupo de crecimiento personal que facilito hemos estado trabajando el tema del apego, un aspecto muy presente actualmente en nuestras vidas y que nos quita tiempo y energía.

La gestión de significado que hemos abordado en el grupo sobre el apego se refiere a una vinculación mental y emocional a objetos, personas, actividades, ideas o sentimientos determinados que nos hace incapaces de renunciar a él.

La estrategia emocionalmente ecológica que nos puede conducir al bienestar sería descubrir lo que un@ no necesita y proceder a librarse de ello, apartarlo, desvincularse de ello. Aunque a veces desprenderse no es tan sencillo.

Hoy os traigo aquí algunas estrategias que pueden ayudaros a comenzar:

  • Cambiar el deseo de posesión por las ganas de disfrutar (cambiar el «poseer» por «tener» sin atar, ni atarse). Disfrutar mientras lo conservamos y queremos, sin tener que adueñarnos de nada, ni identificarnos con ello.
  • No dejar que las cosas te dominen. ¿Quién domina a quién? ¿yo «poseo» tal cosa o esa cosa me «posee» a mi?
  • Aprender a discernir entre lo que vale la pena y lo que hay que desechar. Si no retengo las situaciones o cosas, éstas pasarán de largo. ¿Por qué intentas hacer «tuyo» lo que no te corresponde?
  • Amplia tu perspectiva. No esperes el gran resultado para pasarlo bien, no te obsesiones con el premio, disfruta del «proceso». «Ir hacía» es tan importante como «llegar a».
  • Abre tu mente «nada es para siempre». Todo está en continuo cambio y las cosas nunca serán iguales, todo está en constante transformación aunque lo percibamos igual.
  • Hay que adaptarse. Disfruta sin apegarte, pierde el control y acepta lo peor que pueda ocurrir. Desapegarse consiste en ver las cosas como son y aceptarlas.
  • Olvídate del autoengaño. Sólo estando en contacto con lo que ocurre de verdad, con lo que realmente es, podrás afrontarlo. Las mentiras que nos decimos son una forma de evitación.
  • Practica la humildad. No eres tan importante como para que el mundo gire a tu alrededor, más bien es al revés el universo te contiene. Así que las cosas no deben de ser como te gustaría que fueran, son como son.
  • Aplica el sentido común. No hay que ver apegos por todas partes, sino tener claro cuándo se está jugando con fuego, y cuándo no para tomar decisiones sobre ello. No reprimas tu capacidad de sentir.
  • Explora en tu interior. No hay apego sin miedo, pregúntate honestamente: ¿Qué me ofrece este apego? ¿Compensa algunas de mis debilidades? ¿Me brinda algún placer?. Mira en tu interior y darás con el foco de tu dependencia.
  • Observa tu lenguaje. Somos lo que nos decimos. Procura no sabotearte a ti mism@ utilizando afirmaciones destructivas.
  • Cuestiona tus aprendizajes. Tu educación y aprendizajes, las reglas y modelos que te inculcaron están en ti, en tu manera de ser y de concebir el mundo. No creas ciegamente estos aprendizajes, cuestionalos y hallarás contradicciones que posiblemente quieras cambiar. Se tú a partir de ahora, sigue tu corazón, él sabe quién eres en realidad.
  • Práctica la congruencia. Intenta ser auténtic@ y honest@ en cada acto de tu vida. Alínea lo que piensas, sientes y haces.
  • Abandona el control. Deja que la espontaneidad ocupe un lugar en tu vida. Aprende a gestionar la incertidumbre.

Soltar el apego es posible, recuerda que para ello deberás trabajar seriamente, si quieres cambios significativos, no te conformes y lleva a la práctica acciones concretas.

apego

«El individuo ha luchado siempre para no ser absorbido por la tribu. Si lo intentas, a menudo estarás sol@, y a veces asustad@. Pero ningún precio es demasiado alto por el privilegio de ser un@ mis@» Nietzsche 

Deja un comentario